¿Por qué no empezar no solo a apreciar los deportes y ver competencias a través de la TV o detrás de las gradas, sino a practicarlos? Pensar en nuestro bienestar es la clave para lanzarnos a ello, y apostamos a que siempre has querido hacerlo, solo se trata de elegir bien.

No todo es Gym, y sobre todo si ya has llevado una vida bastante sedentaria tendrás que empezar por adaptarte de a poco, incluso podrías elegir un deporte al azar y finalmente analizar cuál es el mejor para ti de acuerdo a tu desenvolvimiento y gustos, porque el objetivo es apasionarse y no detenerse.

En la balanza entre los ejercicios para principiantes y los deportes para expertos, se encuentra el Running, es ideal para todos y tú eliges el nivel de avance, no se necesita un coach ni asistir a un lugar encerrado y específico para aprovecharlo al máximo, todo lo contrario, ¡es un deporte libre y excitante!, ¿por qué? Te lo contamos a continuación.

Un momento completamente tuyo:

Si lo que buscas además de mantenerte en forma, enérgico y con buena salud es no volver a tu ejercicio un momento de alarde y alboroto, puedes optar por tomar unos minutos de tu día, ponerte cómodo y salir de casa sin ninguna explicación. Si tú lo prefieres, el running puede ser un deporte independiente.

Tú y una lista de reproducción musical:

Poner tu música favorita en casa mientras se está completamente atareado o intentar llevar auriculares a un gimnasio en medio de tantos equipos, puede no ser la mejor opción. Pero si eres un runner el camino es tuyo, y tienes espacio de sobra, además, correr es un ejercicio completamente abierto a la relajación y liberación del estrés.

Más atlético:

Nivel de respiración y velocidad, su sinergia y control, parece complicado ¿no?, pero solo es cuestión de ser constante y de ir con calma, porque ciertamente, al correr, el cuerpo se llena de oxígeno llevándolo a los músculos e interfiriendo en su resistencia y rendimiento atlético en general. Además, correr mejora el sistema cardiorespiratorio, ya que vuelve al corazón mucho más fuerte.

Fortalecimiento de huesos y articulaciones:

El running incrementa la densidad de los huesos, y es uno de los deportes donde se trabaja el mayor número de músculos.  Pero, con el fin de que el proceso de tonificar sea impecable es necesaria una dieta rica en calcio y proteína, que puedes consumir de manera saludable y súper deliciosa con ¡Shake Me!®!

Ayuda a lograr un mejor descanso y sueño saludable:

Si después de un día de trabajo, liberas energía a través del ejercicio, la noche será el momento perfecto para que tu cuerpo colabore en una nueva recarga de energía, la cual solo se llevará a cabo si has dormido bien y correr sí que marca esta diferencia.

Paseo en grupo:

Incluso si para ti resulta motivador llevar un acompañante en tu caminata, por supuesto que también es posible. Hay inscripciones a clases y carreras con diferentes niveles, en los cuales puedes iniciarte con el propósito extra de conocer gente nueva y encontrar un punto de apoyo y personas con intereses en común.

También es una causa social:

Podría decirse que la práctica del running es un deporte noble y que busca la unificación de personas en todo el mundo o al menos en una misma zona, y que en incontables ocasiones, los maratones conllevan a una buena causa con eventos solidarios, ¿necesitas más motivos para sacar toda tu energía y dejarla en la pista?

Llevar el running en tu maleta de viaje:

Por supuesto que lo sabes, correr es trasladable, pues donde sea que te encuentres habrá un buen lugar para salir a relajarte mientras prácticas. Además, si tus propósitos ya se han convertido en llevar al running a otro nivel, te aventurarás a carreras y maratones en otras partes del mundo, Nueva York, Japón, España, México, Italia, Reino Unido, y ¡muchos más!

Realización personal:

Correr puede ser una actividad profesional o solo el comienzo de una vida deportiva en el que te hayas potenciado de fuerza y valor para llevar tu aptitud a otro deporte. Empezar por ponerte objetivos de dos kilómetros puede llevarte a la satisfacción de haber descubierto que en realidad corriste seis kilómetros. Y es que marcarte objetivos y superarlos poco a poco te llenará de confianza para cumplir cualquier meta.

Correr es un deporte que nunca pasará de moda, intensifica el optimismo y siempre será un buen momento para comenzar a practicarlo. Ya tienes 9 razones para despertar tu alarma runner y existen muchas más, ¡ve por ellas!

Estamos en la era de la practicidad, por lo que andar de prisa y encontrar la forma más simple de hacer las cosas está a la orden del día, como tener varias gaseosas o jugos procesados en la nevera. Es necesario comprender que nuestro cuerpo requiere de atención y tiempo y, por supuesto de hábitos saludables. Es probable que ahora no te afecte del todo esa rutina donde el agua apenas se asoma en tu dieta, pero a largo plazo podría ser lamentable.

Seguro has escuchado que debes beber al menos dos litros de agua al día, pero realmente sabes ¿por qué?, ¿cómo?, o ¿en qué momento es más favorable para tu organismo? Recuerda que nunca es tarde para cambiar tu vida, y después de escuchar los grandes beneficios del agua, ¡no podrás evitar tomarla todo el tiempo!

Tú cuerpo es agua:

Si somos agua en más de un 70%, esto nos dice que simplemente no funcionaremos sin ella, ya que interviene en casi todos nuestros procesos fisiológicos. El primer beneficio es la eliminación de toxinas, evitando que sean absorbidas por nuestro cuerpo y nos ocasionen enfermedades.

Efecto détox:

Beber agua es el mejor comienzo para lograr un tratamiento detox, consumir más agua ejercita la diuresis, ayudando a los riñones a deshacerse de residuos y nutrientes innecesarios a través de la orina, así como volver más solubles los minerales concentrados.

En ayunas es el primer momento para recibir los beneficios del agua en todo su esplendor. Uno o dos vasos de agua serán suficientes para activar tu metabolismo, estimular la digestión y ayudar a que las células del cerebro reciban una mejor oxigenación. Si el agua está tibia o a temperatura ambiente sus beneficios son mayores al impulsar el proceso de depuración.

Digestión:

Si al hábito de beber agua, lo combinas con la ingesta de fibra, lo estás haciendo bien, pues de ello dependerá permanecer lejos del estreñimiento. El agua es fundamental en la disolución de nutrientes para que sean absorbidos y transportados a las células.

Belleza:

El agua es también un gran aliado cuando de verse más guapa se trata. Mejora la elasticidad y tonicidad de la piel, y evita la aparición de arrugas prematuras.

Elige un recipiente no desechable:

Lleva tu Shaker a todos lados, así no necesitarás adquirir agua embotellada jamás. Esta práctica sí que tiene efectos positivos en tu salud. Ya que hemos escuchado que beber de una botella de plástico podría no ser tan buena idea para tu bienestar y tampoco para el medio ambiente.

Un dato importante es que al exponer las botellas de plástico al calor, tal como caminar con ella bajo el sol, llevarla en el portavasos del coche o tenerla en el gym en época de calor, las capas de plástico marcadas con los códigos de reciclado 3 o 7, liberan un componente llamado bisfenol que es altamente perjudicial para la salud, y el problema es que cuando se ingiere, altera y modifica el buen funcionamiento del sistema endocrino.

¿Tomarle gusto al agua?

Claro que es importante aprender a tomarle amor a este hábito, tal como si fuese una parte vital de nuestro cuerpo, porque de hecho, vaya que lo es. Pero de vez en cuando durante el día se puede variar su manera de consumirla, el agua se puede alternar con otros alimentos, siempre que sean productivos para nuestro cuerpo, tal como infusiones, frutas naturales o ¡Cleanse Me!®!, una explosión refrescante de sabor y baja en calorías.

No olvides beber agua constantemente durante el día y no esperar a tener esa molesta sensación de sed, que además habla de una temprana deshidratación. Y recuerda que también puedes obtenerla de las frutas y vegetales, que proporcionan un gran aporte de agua.

Si bien es sabido que todos debemos llevar una dieta equilibrada y saludable, hay quienes no logran mantener una buena digestión por más que hagan cambios en su lista del supermercado. Hay que tener en cuenta que en ocasiones no solo es el qué, sino la medida y el cómo preparamos los alimentos que consumimos.

Una alimentación saludable, puede empezar por mejorar la función de tus ácidos gástricos y flora intestinal, regenerando y fortaleciendo tu estómago. ¿No sabes por dónde empezar? ¡Nosotros sí! Te damos los 6 mejores consejos para cuidarte.

1. Mantener una dieta blanda: (especialmente en el desayuno y la cena), la cual consiste en alimentos de “fácil digestión”. ¿Por ejemplo? Shake Me!®. ¡No existe nada mejor! Es delicioso y súper nutritivo, y le caerá excelente a tu estómago.

2. Carnes: lo ideal es limitarse a las carnes magras (de preferencia pollo o pavo) y cocinarlas a la plancha, cocidas o al horno. Si prefieres dejar un poco la carne, algunos sustitutos como la soya ¡son tu mejor opción!

3. Pescado y huevos: el pescado blanco es sin duda más digestivo que el azul, y tiene menos grasa. Los huevos deben consumirse en menor medida, cómelos mejor cocidos, o solo la clara, si usas aceite, que sea de oliva extra virgen.

4. Vegetales: evita aquellos que generalmente causan inflamación, entre ellos se encuentran: la cebolla, coliflor, repollo, etc. Cuando prepares tus vegetales, ¡tu mejor opción es al vapor!

5. Bebidas: la importancia de beber 2 litros de agua al día ya la conoces, es un sí o sí. Sin embargo, sabemos que necesitas una deliciosa variedad en este punto, pues ¡Cleanse Me!® es la opción perfecta!, su contenido de prebióticos y antioxidantes ofrecen una forma deliciosa, saludable y baja en calorías ¡de cuidar tu digestión!

6. Lácteos: si tienes problemas digestivos, probablemente seas intolerante a la lactosa, por eso te recomendamos el uso de leches vegetales como la de soya, almendras, chía, etc. Son mucho más saludables y ligeras.

¡No hay excusas para descuidar tu salud! Con estos tips lograrás revitalizar ese delicado estómago, o en su lugar, podrás prevenir problemas futuros.

Ya terminó diciembre, ¡y por lo tanto las excusas! Comienza un nuevo año y ¡una nueva oportunidad para lograr todos tus objetivos! ¿No sabes por dónde empezar? ¡Nosotros sí! Haz estos pequeños cambios y verás una gran transformación.

1. Sustituir alimentos:

Cuidarse no significa dejar de comer lo que nos gusta, sino de tomar las mejores decisiones. ¿Te encanta el postre? Las frutas pueden ser una alternativa deliciosa, nutritiva y baja en calorías. ¿No te imaginas una fruta de postre? Prepara los postres más saludables y bajos en calorías utilizando ls ingredientes correctos. Shake Me!®, gracias a sus 3 deliciosos sabores y su versión vegana, puede ayudarte a darle sabor a todos tus postres favoritos, ¡y sin culpas!

2. Leer las etiquetas de los productos:

Nos referimos a realmente leerlas, hay alimentos engañosos que pueden parecer sumamente saludables, pero una vez que los investigas a fondo, ¡no son lo que parecen! Y ¡cuidado con las versiones light, bajas en grasa o sin azúcar! de tus alimentos favoritos. Estos alimentos suelen ser versiones mucho menos saludables al tener mayores cantidades de grasa, almidón, sal o azúcar para poder igualar el sabor de su versión normal.

3. Hacer el Reto VIVRI®:

El Reto VIVRI® es la forma más ¡práctica y rápida de lograr tus objetivos! Cuenta con 3 productos de la más alta calidad e ingredientes Premium. Además, todos son bajos en calorías al estar endulzados con stevia y ¡deliciosos!. ¡Definitivamente es el primer paso para lograr y mantener tus objetivos!

4. Cuidar tus porciones:

Es uno de los problemas más comunes, por falta de conocimiento podemos no estar comiendo las porciones correctas. ¡Y tomar el control es más fácil de lo que crees! Visualiza tu plato, asegúrate que la mitad del plato esté lleno de verduras, y la otra mitad esté repartida mitad proteína y mitad carbohidratos. ¡Ojo! Elegir los carbohidratos adecuados también es clave, dile adiós a las harinas blancas y mejor elige cereales integrales como el arroz o la pasta integral.

5. Mantenerte activo:

Probablemente no tengas tanto tiempo para esta cambio, pero la realidad ¡es que no lo necesitas! Puedes optar por entrenamientos de alta intensidad que en tan solo unos cuantos minutos te harán sudar aún más que una hora en el gimnasio. También puedes hacer pequeños cambios en tu rutina: tomar las escaleras en lugar de el elevador, ir en bici al trabajo, estacionar el carro más lejos para que camines un poco más. Parecen cosas sencillas pero ¡realmente harán la diferencia!

6. Dile adiós a los malos vicios y hábitos:

Si ya estás intentando llevar una vida más saludable, ¿por qué no hacerlo en todos los sentidos? El alcohol, saltar comidas y fumar pueden ser hábitos que aunque no lo creas ¡también afectan tu figura! Puede parecer demasiado difícil dejar todos de una sola vez, puedes ir intentando de uno por uno, ¡lo importante es que tarde o temprano lo logres!

¡Así de fácil! Puede parecer algo un poco complicado al principio, pero con el tiempo verás lo fácil que es, y lo mejor de todo ¡que realmente da resultados y te ayudará a sentirte mejor que nunca!